Agrodescendiente y criada entre dos ciudades colombianas, una montaña -el cerro tusa- y muchos barrios. El movimiento territorial ha sido siempre parte de mi vida, por lo que mi trabajo germina, a partir de múltiples preguntas sobre las migraciones humanas -tanto internas, como sur-sur y sur-norte-, como resultados de procesos coloniales y de la violencia política.

Estoy interesada en la narración de geografías, territorios y relatos sobre el desplazamiento territorial y en la visualización de las relaciones entre las transformaciones del paisaje, los flujos migratorios y las actualizaciones sistemáticas del orden colonial. Desde ese fermento, pienso en las supervivencia de la ternura entre la violencia y el trauma, y sobre el arte como una herramienta en el diseño de dispositivos colaborativos que pongan en primer plano la cooperación, el cuidado de la memoria, la escucha, y las múltiples interdependencias como sostenedoras de vida.

Aprendí a tejer y a bordar con mi madre, mis amigas y mujeres tejedoras en distintos lugares de Abya Yala, y a hacer electrónica con artistas y tutoriales, y uso ambos lenguajes como lentes desde los cuales entender el mundo y las relaciones entre lo viviente, y como herramientas y metodologías con las cuales desarrollo performances, objetos e instalaciones.